Ubica tu  terrario junto a una ventana con luz natural, sin sol directo. Es preferible ir girando el terrario cada cierto tiempo para que todas las partes reciban la luz que necesitan de manera uniforme.

En la mayoría de los casos solo hay que regar un par de veces al año ya que el ciclo del agua se reproduce en el interior de manera constante. Riega con agua mineral cuando observes la tierra seca en la base de la planta principal.

La condensación es parte del continuo ciclo del agua que hay el interior que hace que el ecosistema sea casi autosuficiente. Si existe un exceso de condensación que no te permita ver las plantas , simplemente retira la tapa un tiempo para que el exceso de humedad se evapore.

Puedes cortar las hojas cuando toquen el vidrio, de esta forma tendrá una mejor visual y densificará la planta.